La Victoria... ¡¡¡TIENE GUSTO A CHELA!!! (y heladita!!)

Harán... ¿2 meses atrás? que venía desde la U a mi casa... después de un día de presentaciones, trabajos, pruebas... día muy pesado. Mientras venía en la D18, me bajó el antojo de comprarme una chelita, para celebrar el término de ese denso día.

Eran mas menos las 20:00 hrs, cuando iba a abrir mi chelita... pero al día siguiente, tenía prueba. "Pucha" -pensé yo- "con chela no se puede estudiar. Filo, la guardo y me la tomo mañana".

Ese "mañana", cual Lucho Jara, se fue haciendo interminable, porque todos los días requerían estudio y cerebro al 100%. Así, tras una semana o dos, miré la chela y dije "ya, listo, tu quedaste como la chela de la victoria. Cuando apruebe todo, te voy a tomar y disfrutar como nunca".

(nótese que el desastre de fondo no es falta de cuidado; es el mero reflejo del caos que tenía en mi pieza estos últimos meses. Y quería reflejarlo en su integridad, antes de mañana que queda la pieza reluciente, como nueva, ajajaja )

Y pasó el tiempo. Sin darme cuenta, pasaron dos meses. Pruebas finales, pruebas recuperativas, trabajos finales, peleando hasta la última décima. ¿El control que no di se rellena con un 1.0, no? Patéticamente luchando hasta los 1.0 de los controles no dados, pues todo eran décimas a mi favor. Y en todo ese proceso, llegaron los examenes: Persona, Método III, Psiquiatría. Dos seguidos, y el último, hoy.

La nota de Persona la supe a las 15:00 horas de ese jueves. Había superado lo mínimo que necesitaba, y por ende, aprobaba el ramo. Primera alegría, pero todavía quedaba mucho camino por recorrer. Con la ayuda de la Fany, empezamos a ponerle "weno" a método III, para el examen del día siguiente. Para variar, las notas de ese ramo se demoraron su buen resto... hasta hoy que las supe por medio del ayudante. Rasante. Parejito. Justito. Un "finito". Maní para mí. La nota me aprobaba, y desde ya podía cantarle "CHAAAAAAAAAAO!!" (así como la U de Conce a la católica el otro día? Ups... se me salió! Wajkajkajajka) a método III.

Pero todavía faltaba uno más. Psiquiatría. Necesitaba la menor de las notas, y estaba ya tan apestado de todo, que me daba lo mismo quedar para enero o no. Si o si, era el último examen del año. Me vine para mi casa, almorcé, tomé algo frio... y la Mely me avisa que las notas ya estaban, y que estaban en UCEN21 (¡milagro!). Revisé mi nota, y la alegría que había estado contenida en mi, hasta el término de mis examenes, explotó. Tal como lo había dicho antes, este año aprobaba todo, carajo!. Y así fue.

Y en eso, mi compadre EnAnO me dice "a abrir la chelita!". La chelita famosa, que en la alegría se me había olvidado. Así que, raudamente, fui a por el símbolo del triunfo, y a quitarle su sello tan esquivo hasta hoy:

(tssss!!)

Y... ¡¡¡SALUD CARAJO!!!

(no te gusta mi cara? Como dirían por ahi: me importa un peeeek... )

Y colorín colorado, estas vacaciones... ¡¡¡HAN COMENZADO!!!

Saludos a todos y todas los que pasan por acá . Espero comentarios al por mayor!!!

PD: Y NI CON PUÑALAZO ME SACARON DE MÉTODO III, MARAGGGGGGGGAS! WAJKAJKAJKAJKAJKAJKJKAJKA (solo para entendidos )